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jueves, 3 de enero de 2013

¿EN QUE AÑO ESTAMOS?: EL CALENDARIO GREGORIANO

Saludos gente de la red. Empieza un nuevo año y pensando a eso de las 5 de la mañana del 1 de enero mientras me sentaba a recuperar fuerzas de la terrible ingestión alcohólica de la madrugada mire al cielo y recordé algo que aprendí en la escuela, que realmente el año no dura 365 días, sino 365 días y un cuarto por lo que en realidad el año cambia más o menos a las 6 de la mañana, y pensando en recibir el año "verdadero" me quedé esperando las 6 a.m. Pero me ganó  la borrachera el sueño y finalmente me desperté a eso de las 3 p.m y ya no pude presenciar el verdadero cambio jajaja Bueno, en verdad esa pequeña incógnita me llevó a recabar en esa información sobre los años cosa que es bastante interesante y que mejor que compartirles en esta fecha donde muchos no sabíamos cuando carajos empezaba el verdadero 2013.



Para empezar ¿Por qué hay años antes de Cristo a.c y después de Cristo d.c?

Siempre me preguntaba como sabían los romanos que estaban por ejemplo en el año 35 a.c, como sabían que en 35 años nacería Cristo??? obviamente soy un burro jajajaj pero no hay pregunta pendeja sino pendejos que no preguntan, bien eso lleva a la concepción de los calendarios, resulta que cada cultura antigua tenía su calendario basado en observaciones astronómicas, los egipcios, los chinos, japoneses, persas, romanos y demás tenían sus propios calendarios, algunos años duraban 304, 365, 374 días, era todo porque cada cultura tenía su modo de medir el tiempo y tomaban su año 1 dependiendo de algún evento importante o de alguna conveniencia, así que en realidad antes de Cristo no había años antes de Cristo, sino que utilizando el tiempo romano este año fue el 754 a.u.c (desde la fundación de Roma) o el año 46 desde la implantación del calendario juliano. 



Bien lo que importa de esta parte es saber que cada quien mide el tiempo desde un punto en el que quiere, o sea el año 1 donde diablos estará en realidad????, y lo segundo es la existencia de los calendarios que tomaban al año con diferencia de días y que finalmente se unificarían y tomarían de referencia el año 46 como el año 1 d.c cuando roma se convirtió al cristianismo, pero veamos de a poco más.

El calendario prejuliano y juliano

Como dije antes, cada cultura usaba su propio calendario, pero veremos el romano porque de él se desprende el que usamos actualmente.



Usualmente las culturas antiguas usaban el calendario lunar y solar, para determinar ciclos más cortos mediante la luna y ciclos largos (años) mediante el sol, bien los romanos después de mucho alegar y con unos tragos encima acordaron un año de 304 días, este calendario es el calendario romano o prejuliano, estaba conformado por 10 meses, 6 meses de 30 días y 4 de 31, como obviamente este calendario tenían un defasaje de tiempo, al final del año los sacerdotes ajustaban el calendario, o sea decían, vean este mes va a tener más días, así que aun no quemen los años viejos jajaja en realidad los ajustes se hacían a conveniencia, como ajustar fechas para paga de impuestos, para extender mandatos de gobernantes, para controlar votaciones, en fin, el año empezaba en marzo porque era tiempo de acomodar a los ejércitos.

Como los ajustes no se hacían bien, resultó que el tiempo se defasó teniendo al invierno del calendario cuando en realidad era otoño WTF!!! así que el entonces emperador Julio César se cabreó y reformó el calendario romano, pasándose a llamar calendario juliano.



El calendario juliano se implantó en el año 46 a.c y ese año para compensar todos los defasajes de tiempo se añadió días al año, ese año duro 445 días y se llamó "el último año de la confusión" ese si fue el año más largo de la humanidad imagínense esperar tanto para fin de  año jajaja

El  calendario juliano considera un año de 365 días y cada cuatro años  se añade otro al año para compensar el adelanto de tiempo que ellos calcularon, pues un año era 365,25 días. El año de 366 días se llamó bisiesto porque en esa época se añadía un 24 de febrero y se lo llamaba día sexto (sexto antes de marzo) "bis sextum" y de ahí el nombre.

Sin embargo como cada sacerdote loco tenía su idea del tiempo, decidieron poner años bisiestos cada tres años desde el año 44 a.c y eso produjo un desfasaje que se notó en el año 10 a.c y para corregir eso el emperador César Augusto corrigió en el año 8 d.c  quien ordenó quitar los años bisiestos hasta el año 44 d.c.

El año 153 a. C. se toma como inicio del año el 1 de enero, en lugar del tradicional 1 de marzo, para poder planear las campañas del año con tiempo debido a las Guerras Celtibéricas que se estaban desarrollando en la Península Ibérica y los problemas que estaba causando la conquista y asedio de Numancia. Consta de 365 días divididos en 12 meses, excepto los años bisiestos que tienen 366 días, y añaden un día adicional al mes de febrero. El calendario juliano cuenta como bisiestos uno de cada cuatro años, incluso los seculares (años múltiplos de 100). Con este calendario se comete un error de 3 días cada 400 años.

Los meses eran así:

La distribución de los meses y días en el mundo clásico
Mártium (31 días)
April (30)
Máium (31)
Júnium (30)
Quintil (30)
Sextil (30)
Septémber (30)
Octóber (31)
Novémber (30)
Decémber (31)
Januárium (31)
Februárium (30) (31 en los años bisiestos)


En el año 321 d. C., el emperador Constantino I el Grande implantó la semana de siete días, copiada del calendario lunar de los mesopotámicos, los cuales establecieron la semana de siete días basándose en los planetas (incluidos el sol y la luna) que se podían observar desde la tierra: domingo, lunes, martes, miércoles, jueves, viernes y sábado. Esta división de la semana en siete días, es la que con el tiempo se masificaría en las distintas culturas.



Además, decretó que el domingo (dies solis) fuese día de descanso para adorar a Dios, en detrimento del sábado, tradicional no sólo entre los judíos sino también entre los gentiles. Y es que si Jesucristo había muerto el sexto día de la semana judía, y había resucitado en domingo, el primer día de la semana judía. Por otro lado, se satisfacía a otra religión muy popular a la que perteneció el propio Constantino, el culto a Mitra, cuya representación era el sol. La semana de siete días se hallaba también presente en el antiguo calendario egipcio.


Bien el calendario juliano considera al año con una duración de 365,25 días pero la cifra correcta es de 365,242189, es decir, 365 días, 5 horas, 48 minutos y 45,16 segundos. Eso da un error de unos 11 minutos por año.  Esos más de 11 minutos contados adicionalmente a cada año habían supuesto en los 1257 años que mediaban entre 325 y 1582, un error acumulado de aproximadamente 10 días, por lo cual se instauró el calendario gregoriano. 

El calendario gregoriano



Bien como les indiqué antes el calendario juliano tenía un error de 11 minutos que habían causado que para 1582 se hubiesen defasado 10 días, para esa época era muy importante determinar la fecha de la pascua, el método se había determinado en el año 325 d.c en el Concilio de Nicea. 

Bien de paso aprendemos como se determina la pascua y el miércoles de ceniza y el carnaval yuhu, resulta que  la Pascua debía conmemorarse el domingo siguiente al plenilunio posterior al equinoccio de primavera en el hemisferio norte (equinoccio de otoño en el hemisferio sur). Aquel año 325 el equinoccio había ocurrido el día 21 de marzo, pero con el paso del tiempo la fecha del acontecimiento se había ido adelantando hasta el punto de que en 1582, el desfase era ya de 10 días, y el equinoccio se fechó el 11 de marzo.

Como nadie quería fanesca a destiempo, se decidió corregir el calendario mediante la reforma del  Papa Gregorio XIII asesorado por el astrónomo Christopher Clavius. 



El calendario gregoriano adelanta cerca de 1/2 minuto cada año (aprox. 26 s c/año), lo que significa que se requiere el ajuste de un día cada 3300 años. Esta diferencia procede del hecho de que la traslación de la Tierra alrededor del Sol no coincide con una cantidad exacta de días de rotación de la Tierra alrededor de su eje. Cuando el centro de la Tierra ha recorrido una vuelta completa en torno al Sol y ha regresado a la misma posición relativa en que se encontraba el año anterior, se han completado 365 días y un poco menos de un cuarto de día (0,242189074 para ser más exactos). 

Para hacer coincidir el año con un número entero de días se requieren ajustes periódicos cada cierta cantidad de años. De la regla general del bisiesto cada cuatro años, se exceptuaban los años múltiplos de 100, excepción que a su vez tenía otra excepción, la de los años múltiplos de 400, que sí eran bisiestos. 



La nueva norma de los años bisiestos se formuló del siguiente modo: la duración básica del año es de 365 días; pero serán bisiestos (es decir tendrán 366 días) aquellos años cuyas dos últimas cifras son divisibles por 4, exceptuando los múltiplos de 100 (1700, 1800, 1900...), de los que se exceptúan a su vez aquellos que también sean divisibles por 400 (1600, 2000, 2400...). 

El calendario gregoriano ajusta a 365,2425 días la duración del año, lo que deja una diferencia de 0,000300926 días o 26 segundos al año de error. Este error se acumula hasta llegar a un día cada 3300 años.


Sin embargo, intentar crear una regla para corregir este error de un día cada 3300 años es complejo. En tan largo tiempo la Tierra se desacelera en su velocidad de rotación (y también se desacelera el movimiento de traslación) y ello crea una nueva diferencia que es necesario ir corrigiendo. La Luna ejerce un efecto de retraso sobre esta velocidad de giro por la excentricidad creada por las mareas.

Este error es solo de una parte por millón. Lo más práctico será que cuando la diferencia sea significativa, es decir, cuando llega a ser de un día se declare que el próximo año bisiesto no se celebre. De todas maneras, quedan casi dos mil años de análisis y discusión antes de necesitar este ajuste.



Otro problema distinto, como ya se ha señalado, es la disminución de la velocidad de rotación terrestre (y también de la traslación terrestre), la cual se puede medir con gran precisión con un reloj atómico. Es un problema distinto porque no tiene que ver nada con el cálculo del calendario y, por lo tanto, con los ajustes que se le tengan que hacer al calendario. Más bien es al contrario: es el reloj atómico el que tiene que ajustarse a los movimientos de la Tierra, es decir, a la duración del día solar y del año terrestre. El reloj atómico mide un tiempo uniforme que, por lo tanto, no existe en la naturaleza, donde los movimientos del mundo físico son uniformemente variados.

El año de 1582

En este año se impuso el nuevo calendario, al jueves -juliano- 4 de octubre de 1582 le sucede el viernes -gregoriano- 15 de octubre de 1582. Diez días desaparecen debido a que ya se habían contado de más en el calendario juliano.



El calendario se adoptó inmediatamente en los países donde la Iglesia Católica tenía influencia. Sin embargo, en países que no seguían la doctrina católica, tales como los protestantes, anglicanos, ortodoxos, y otros, este calendario no se implantó hasta varios años (o siglos) después. A pesar de que en sus países el calendario gregoriano es el oficial, las iglesias ortodoxas (excepto la de Finlandia) siguen utilizando el calendario juliano (o modificaciones de él diferentes al calendario gregoriano). Sin embargo, fuera del mantenimiento de un calendario eclesiástico diferente en algunos países, el calendario gregoriano es el que se considera como base para el establecimiento del año civil en todo el mundo, incluyendo los países con un año eclesiástico o religioso diferente al que se estableció en la reforma gregoriana del siglo XVI.

División del Calendario

Nombre       Días
1 Enero         31
2 Febrero     28 ó 29
3 Marzo         31
4 Abril                 30
5 Mayo         31
6 Junio                 30
7 Julio                 31
8 Agosto         31
9 Septiembre 30
10 Octubre          31
11 Noviembre 30
12 Diciembre   31


Con la eliminación de estos diez días desaparecía el desfase con el año solar. Para que no volviera a ocurrir, en el nuevo calendario se eliminaron tres años bisiestos cada cuatro siglos. Con lo anterior, el 4 de octubre de 1582 fue el último día del calendario juliano y el 15 de octubre de 1582 constituyó el primer día del calendario gregoriano. Por tal razón no existieron las fechas del 5 al 14 de octubre de dicho año.

Si se usan métodos actuales, el cálculo de fechas anteriores al 15 de octubre de 1582 siempre será erróneo, ya que se deben utilizar exclusivamente en retrospectiva hasta esta fecha y cambiar a cálculo de fechas julianas a partir del 4 de octubre de 1582, sin olvidar estos 10 días inexistentes.


Duración del calendario gregoriano

El calendario gregoriano distingue entre :
- año común: el de 365 días
- año bisiesto: el de 366 días
- año secular: el terminado en "00" -múltiplo de 100-

Es año bisiesto el que sea múltiplo de 4, con excepción de los años seculares. Respecto a éstos, es bisiesto el año secular múltiplo de 400.

De esta manera, el calendario gregoriano se compone de ciclos de 400 años:
En 400 años hay (400/4)-4 seculares = 96 años bisiestos
De los 4 años seculares, sólo uno es bisiesto (múltiplo de 400)
En el ciclo de los 400 años tenemos 96 + 1 = 97 años bisiestos, y 400 - 97 = 303 años comunes

Haciendo el cómputo en días:
97 x 366 días = 35.502 días
303 x 365 = 110.595 días

Esto hace un total de 146.097 días en los 400 años, de modo que la duración media del año gregoriano es de 365,2425 días.



En los 400 años del ciclo del calendario gregoriano, estos 146.097 días, que son 20.871 * 7 días, hay un número entero de semanas 20.871, de tal modo que en cada ciclo de 400 años no solo se repite exactamente el ciclo de años comunes y bisiestos, sino que el ciclo semanal también es exacto, esta congruencia da lugar a que tomando un grupo de 400 años seguidos, el siguiente ciclo de 400 años es exactamente igual.

La primera semana del año, la número 01, es la que contiene el primer jueves de enero. Las semanas de un año van de la 01 a la 52, salvo que el año termine en jueves, o bien en jueves o viernes si es bisiesto, en cuyo caso se añade una semana más: la 53.

Mes: periodo de 30 ó 31 días, salvo para febrero que tiene 28 días en un año común, y 29 días en un año bisiesto.

Hay un método para saber si un mes tiene 30 días o 31 que aprendí de niño:

Los meses sobre los nudillos tienen 31 días, los que están entre los nudillos tienen 30 días menos febrero claro jeje



Origen de la era Cristiana

Dionisio el Exiguo, monje y matemático del siglo VI, recibió como encargo del papa Juan I, durante el año 525, el cálcular basándose en los datos históricos y bíblicos disponibles la fecha del nacimiento de Jesús. Curiosamente la finalidad de este cálculo no fue una revolución en la forma de medir el tiempo en las historia, sino que identificar las Pascuas y celebraciones religiosas.





El asunto es que en base a este cálculo se fijo el año "1" (en aquella época el cero no hacía mucho sentido), y la numeración que se usó en el calendario Gregoriano, aquel en uso hoy en día, basó la numeración de los años en base a esta misma estimación; digo estimación porque hay disputas sobre la verdadera fecha del nacimiento de Jesús - no tiene importancia, mientras estemos de acuerdo cual es el año que llamamos 1.

Dicho año pasó a ser el año 1 A. D., Anno Domini, año 1 del Señor, pero los años anteriores a éste seguían siendo años a.u.c. Finalmente en el siglo XVII se nombran los años anteriores al 1 A. D. como años antes de Cristo, a. C., y los posteriores son años después de Cristo, d. C..

Importancia del calendario gregoriano

Así, el problema del origen de nuestra era y los que se derivan del empleo de múltiples calendarios diferentes quedó resuelto con la creación del calendario gregoriano: si en él se afirma que la Era Cristiana comenzó 1582 años antes de su elaboración y todos los países respetan esta idea, toda discusión debería acabar; y los temas de cuándo nació Cristo o lo que estableció Dionisio el Exiguo dejan de tener importancia (al menos, desde el punto de vista de la medición del tiempo). 

La cuestión final era la adopción de dicho calendario y, como hemos visto, todos los países del mundo lo han venido adoptando a través del tiempo.



La mayor precisión del calendario persa es algo discutible por una simple razón: se trata de una precisión a la que habría que realizar ajustes en el futuro, lo mismo que sucede con el calendario gregoriano.

 Si dentro de 3300 años (más o menos, cuestión muy importante) habrá que hacer un ajuste de un día al calendario gregoriano, parece bastante probable que el calendario persa tenga también que ajustarse antes de avanzar 3.5 millones de años en el futuro. El tiempo futuro no se puede determinar: la duración del año, del día, del segundo de tiempo, se desacelera con el tiempo, pero no se puede determinar exactamente cuánto ni a que ritmo. Y, sobre todo, un calendario no es importante por una enorme precisión en la medición del tiempo, sino por tener una precisión razonable y una fundamentación clara y aceptada por todos.


Y ENTONCES?????

Toda la historia mostrada aquí nos muestra que la definición de nuestro tiempo es meramente al ojo jeje o sea, es una convención entre la gente para evitarse líos y cuadrarnos todos a una misma fecha, por eso se cambia de año a las 12, sería medio raro dar el abrazo a las 5 de la mañana no??? O ya te duermes o no madrugas jajaja

En fin los años se cuadran como nos convenga así que cuando mismo cambió al 2013 no tengo ni la menor idea, con todo es más fácil contar desde el año 1 d.c a contarlo desde la creación.

Así que les deseo a todos un:





FELIZ AÑO 4.470'000.003: JUAN


2 comentarios:

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