Vencido yermo y abatido
Sumido en el vacío
Vacío obsceno que hiere desde adentro
Besos en labios muertos
Fatídico destino de amar una sombra
Que va distando nuestra historia
Detrás quedan las memorias
Y te evoco mi señora
Enjaularé entre mis pestañas
El agua plata de las lágrimas
¿Cómo oculto la mirada ensangrentada?
Si voy con máscaras de nada
Gritar para no aniquilarme
En tu ausencia desquiciante
La noche es la dama desnuda en mi ventana
Que siniestra me llama me grita que haces falta
Y me arroja al abismo de tu espacio vacío
Morirse de una vez y no enloquecer
“llorando hasta romperse” (Pizarnik)
Imágenes de lo que anhele
Florecerán marchitas
Sobre una lapida
Vencido yermo y abatido
Sumido en el vacío…
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