Empezaré este post quejándome de todo lo que me ha pasado en estos días, y es que de vez en cuando Mefistófeles juega con mi vida como hizo con Fausto, y en esta ocasión ha traído a mí falla tras falla: me estafaron, me robaron, se me pierden las cosas y aparte mis finanzas no están de lo mejor, cada falla tras otra me hace recordar como cuando la vida te juega malas pasadas estas parecen ser más notorias que las cosas buenas, es como alguna vez pensé: si te bajas de un bus al vuelo y pisas una plastota de mierda de perro te preguntarías que en una calle tan grande y dado el tamaño de tal plasta la probabilidad que tienes de pisarla es igual a la probabilidad de tener sexo desenfrenado con Angelina Jolie, pero no terminas con Angelina sino que pisas la plasta del perro!!! ¿Por qué? Es como si fuese inevitable, y es peor ya que como a mi me pasa un pequeño tropezón desencadena más y más cagadas en mi vida que solo se detienen cuando ya estás bajo mucha mierda de perro.
¿Qué sería de la vida sin problemas? El infierno de seguro.
Siempre he pensado que la vida es muy bella para pasarse quejando y por ello he optado por ver siempre el lado bueno de toda situación, desde hace muchos años la buena actitud y el optimismo me ha ayudado a seguir sin flaquear en la vida, casi siempre buscando el lado bueno del caso o preguntándome si mi condición sería mejor que la de alguien más, por ejemplo:
• Vivo en la quinta paila del infierno, puta lejos, allá donde el internet se lleva en baldes, hay una sola calle para que salgan 50 mil cretinos a diario y esto genera un tráfico de dimensiones épicas, es tan lejos la JAI que me toca madrugar en el primer bus que suele tener escarcha de hielo en los asientos para poder llegar a tiempo a la universidad, cuando salgo de juerga me debo preocupar en como volver porque los taxistas me estafan o no quieren ir allá, puedo incluir también: los ladrones y la cultura batracia (reguetonera, ballenatera) de todo el mundo en especial de los chamos (16 años más o menos) que infesta de música de mierda por doquiera que voy y podría seguir dándole patadas a la JAI. Cuando considero esto siempre me pregunto: ¿Por qué vivo aquí?, ¿Por qué a mis padres no se les pudo ocurrir un lugar más bonito para vivir?
- En este caso trato de ver el lado bueno: 1. Chuta Juan al menos tienes una casa propia que tus padres con esfuerzo construyeron y no debes dormir bajo la lluvia, piensa que alguien sin techo te envidiaría un mundo. 2. Vives lejos pero tu barrio tiene aire puro, tiene una subcultura que solo los de la JAI podrían aprender, has aprendido a negociar con los choros, y muchas historias que contar las has vivido en La Billa del Oso (nuestra versión del Bar de Moe), ahí hiciste amigos y en la vida lo que no te mata te hace más fuerte. Pienso en eso, y ya no me quejo de vivir en la JAI.
• La poli: buen lector si no sabes qué es la poli, a groso modo: dizque es la mejor universidad el Ecuador y para que me etiquetes, es una universidad de ñoños, Sí chucha soy ñoño. Bien, retomando este caso: la exigencia de esta institución y el prestigio que algún día tendrás de ser un ingeniero graduado ahí tiene un alto precio: se sacrifica mucho tiempo sin dormir, se pierde la vida social, a veces no te queda tiempo ni para quejarte, todo es esfuerzo, esfuerzo y esfuerzo. Y si no eres fuerte de carácter pagas piso de una, ya que imagínate pasarte estudiando sin descanso, haberte esforzado al 200% y haber dormido 2 horas en un día y que aun así das un examen y te va hecho verga. No sé tú, pero eso desmorona. Y no creo ser el único politécnico que haya sentido eso, que le llamen un sábado por la tarde y te digan: …oye hay una fiesta, puedes ir si no tienes muchos deberes??? Y lo peor es que siempre tienes muchos deberes, a veces la carga es tan pesada que ya no puedes y te desmotivas, a veces pienso si vale la pena tanto esfuerzo.
- Sí vale la pena. Cuando caigo en este spleen pienso: soy afortunado, estudio en una gran institución a costa de los impuestos de toda la gente además me educo gratuitamente. Hay mucho jóvenes que al graduarse no pueden estudiar en un nivel superior, así que estoy privilegiado, al menos yo tengo la suerte de que me saquen la pucta probándome si tengo madera de profesional, en ese caso me reanimo y me digo: Sí chucha, sí puedo.
Una de las razones para no desmoronarme es el recuerdo de un gran amigo mío el ODY, él se convirtió en eternidad hace casi dos años, un tumor se lo llevó, pasó un año combatiendo su enfermedad y en ese tiempo él me enseño a seguir siempre adelante, cuando se fue se quedó impregnado en mi ser su tenacidad, él no se rindió y a pesar de que la enfermedad se lo llevó aprendí que hay personas en el mundo que no se detiene a quejarse sino que luchan y luchan sin importar cuantas veces te abofetee la vida, ya que la vida es para quien se la merezca. En recuerdo a su memoria decidí siempre levantar mi cabeza y no decaer en ninguna circunstancia.
Sin embargo uno no es de hierro, los golpes duelen, somos seres de barro y miedo, y no es difícil dejarse someter por la dificultad, yo dejé acumular mis fallas y me abatieron, escribo esta entrada luego de haber pasado mucho tiempo acostado comiéndome mierda de todo lo malo que me pasó, en esta ocasión creo que tuve suerte pues luego de mucho pensar creo que me di un CTRL+ALT+SUPR y me acabo de resetear, y pensé utilizar este blog que solo gente desocupada como yo ha de leer para desfogar mis últimas iras ya que esa también es otra solución, así que en las siguientes líneas voy a expeler las pocas frustraciones que aún me andan rondando:
Mierda la puta madre que te recontraparió, por qué chuccha a mí la grande pucta, ojalá que al hijuepucta que me robó los lentes se los metan por el orto, que al jetón que me bajó la calculadora le caiga caspa en los huevos, el cabrón que me robó el cargador de la laptop no se le vuelva a parar la verga, y de paso se cargue al que me vendió el cargador de repuesto que no carga ni una mierda, que al conchesumadre que me dio el billete falso se lo follen tres simios sádicos, que el recontra mamaverga que le embarazó a la man que yo siempre quise y que por su culpa nunca me paró bola y además luego de embarazarle se largó como un marica (si chucha a vos Alberto te digo…) se le pudran los testículos, luego se lo tire un caballo con sida y recaigan en él todas mis maldiciones, y por último todos esos problemas monetarios que tengo ahorita se vayan a la casa de la mismísima verga junto con la concha de la Kiki Pérez la grandísima pucta. Amén.
(ufff, que rico, ya me desfogué, perdón por cierto si alguien es sensible pero que chuchas es mi blog!!!)
Repito, la vida sería un infierno sin los problemas, sería muy aburrida. Y la vida es sólo para quien se la merece, aquí en esta tierra y en esta vida es donde se mide el tamaño de tus huevos (es figurativo jetón!!!) y la diferencia entre vencidos y vencedores es de que unos decidieron seguir luchando cuando otros se rindieron. Como buen ingeniero (ya mismo chucha) hay que aprender de la práctica y error, y error, y error. Vamos!!! La vida no te da la espalda, es uno el que decide ver sólo lo malo y por eso creemos que solo nos pasan cosas malas, mientras que las buenas siempre están ahí pero hay que saber buscarlas y nunca dejar de verlas.
He de robarme un fragmento de una canción:
Y verás que en la vida hay que sufrir,
Y verás que en la vida hay que luchar,
Y al final si eres fuerte ganarás,
No queda sino batirnos,
No queda sino LUCHAR!!!!
Y el sudor de tu frente saciará,
Tu sed de tener sueños y vivir,
Y la vida será tu mayor rival,
No queda sino batirnos,
No queda sino LUCHAR!!!!
Yo soy el mejor de los mejores, yo soy el superhombre que Nietzsche visualizó, yo creo en mí y confío en lo que hago, no necesito de un dios que me guíe, yo soy mi propio redentor, no hay nada que me pueda detener, mi límite es el límite de mis sueños.
Arriba, arriba y muy lejos: Juan
(nota: si esta mucho Mägo: que chuchas es mi blog y yo tambien soy novelero!!!)
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